Los pisos Bolon son extremadamente fáciles de limpiar, conservándose en el tiempo casi como el primer día. La limpieza diaria es con aspirador y cuando se produce un accidente y se mancha la mayor parte de las veces basta con limpiar solo con agua, un cepillo y una dosis mínima de limpiador.
VENTAJAS PRÁCTICAS
La gran mayoría de las tareas de limpieza se pueden realizar con una aspiradora, agua, un cepillo para fregar y una dosis mínima de limpiador.
Más higiénico: El tejido de Bolon no permite que los microorganismos vivan en él, lo que lo hace inodoro. Además, están certificados como antibacterianos e hipoalergénicos, aptos para usuarios con asma o alergias. La capacidad impermeable evita que los líquidos sean absorbidos por el piso.
Mejor calidad del aire interior: Las emisiones VOC (Compuesto Orgánico Volátil) de Bolon están muy por debajo de los niveles recomendados.
Costo de mantenimiento reducido: de Bolon es una cuarta parte que el de una alfombra normal, la diferencia de inversión respecto alfombra se amortiza en poco tiempo:
No hay que cambiar las losetas manchadas como en la alfombra, basta con limpiarlas.
Mínimo consumo de agua y limpiador: durante toda la vida útil de 1 m2 de piso Bolon, solo se necesita para limpiarlo 4 Litros de agua y 0,4 litros de detergente